Escena mítica, representativa del surrealismo cinematográfico, del primer y excelente cortometraje de Luis Buñuel y Salvador Dalí rodado por el año 1929. La secuencia se hizo usando un ojo de vaca, y la sensación es tan realista como escalofriante.
Escena mítica, representativa del surrealismo cinematográfico, del primer y excelente cortometraje de Luis Buñuel y Salvador Dalí rodado por el año 1929. La secuencia se hizo usando un ojo de vaca, y la sensación es tan realista como escalofriante.