El día de su quinto aniversario de boda, Nick Dunne (Ben Affleck) informa que su esposa Amy (Rosamund Pike) ha desaparecido misteriosamente. Pero pronto la presión policial y mediática hace que el retrato de felicidad doméstica que ofrece Nick empiece a tambalearse. Además, su extraña conducta lo convierte en sospechoso, y todo el mundo comienza a preguntase si Nick mató a su esposa. Adaptación del best-seller “Perdida”, de Gillian Flynn.
Os dejo con dos de las escenas más potentes vistas en 2014, en HD y VOSE: Por un lado el twist que da el film al cambiar de punto de vista (narrativamente prodigioso) mostrando el enfermizo y retorcido plan maestro de Amy a través de un montaje sublime, y por otro la famosa escena del ketchup a chorretazos, con un dominio formal y un uso del sonido acojonante.
“Perdida” (Gone girl) es sin duda una de esas películas que dejan poso en el espectador y que requieren más de un visionado para saborear toda su compleja a la par que sutil profundidad crítica. Un hostión tremendo a la sociedad actual (vehículo perfecto para invitar al espectador a la reflexión como parte no excluyente de esa crítica) y a los supuestos valores de un matrimonio desgastado y construido a través de la apariencia. Fincher no se limita a rodar una adaptación más de un buen libro. Es un cineasta con personalidad, discurso propio y un imaginario visual tremendamente rico, cuyas arriesgadas y nada complacientes propuestas siempre tratan de remover conciencias e invitar al espectador a que se cuestione ciertos temas. Aunque la trama tiene algún pequeño agujero, estamos ante un thriller fascinante que alcanza la excelencia tanto a nivel narrativo como formal. Está claro que Fincher juega en un liga muy superior. Advierto que las escenas contienen spoilers y no son recomendadas para menores de 18 años. Espero que las disfrutéis. Retorcidamente deliciosas.