Existe una raza de guerreros inmortales condenados a batirse durante toda la eternidad hasta que alguno de los dos perezca, ya que únicamente pueden morir decapitados por una espada y a manos de un igual. Ésta es la trágica existencia de Connor MacLeod, un joven que desde Escocia, en el siglo XVI, hasta la ciudad de Nueva York, en la época actual, vive atrapado por su propia condición de inmortal, condenado a consumar un destino del que ya está cansado y no puede zafarse.