Blu-Ray | Dvd | Reflexiones / Críticas

Cine inédito en España

En el panorama cinematográfico español a parte de los estrenos, los direct-to-dvd (la más que correcta “The midnight meat train” (Ryûhei Kitamura, 2008) tuvo ese trato vejatorio en nuestro país) y los cada vez más habituales retrasos, existe una especie de limbo en donde descansan -en algunos casos quizás para siempre- ciertas películas que, o bien por problemas con los derechos de distribución o bien por dejadez (como ocurre con gran parte del cine asiático), no han sido ni posiblemente serán estrenadas nunca.

Resulta cada vez más frecuente comprobar como un buen número de películas estrenadas en festivales como Sitges o el extinto BAFF por citar dos casos, nunca llegan a estrenarse en cines comerciales (a no ser que tengan majors tras de ellas), debido a que la mayoría de distribuidoras patrias prefiere apostar por productos masticados que sean un valor seguro en taquilla que por otros mucho más arriesgados que quizás requieran del boca-oreja para llegar tener grandes números. La ley del papel verde es la que impera, como siempre. Aún así, hay casos totalmente inexplicables. Por ejemplo, esos films de calidad contrastada o al menos muy interesantes que a la vez poseen grandes dosis de entretenimiento, por tanto, para nada incompatibles con un amplio público, pero que todavía siguen sin encontrar fecha de estreno o distribuidora.

Centrémonos en el caso más conocido: “Equilibrium” (Kurt Wimmer, 2002) , un film interesante aunque tremendamente sobrevalorado cuyo olvido, tanto en cine como en formato doméstico, lo ha catapultado a la fama como inesperada cult movie para muchos. El argumento gira en torno a un mundo futurista con un estricto régimen totalitario, el cual ha eliminado la guerra suprimendo todas las emociones. Los libros, el arte y la música están estrictamente prohibidos, y sentir es un crimen castigado con la muerte. Clerick John Preston (Christian Bale) es un alto agente del gobierno que, persiguiendo y ejecutando a quien desobedece estas reglas, comienza poco a poco a plantearse qué siente él y si merece la pena carecer de emociones. Si hacemos un cocktail de “Matrix“, “Un mundo feliz“, “1984” y “Fahrenheit 451” añadiéndole un poco de slow motion a lo John Woo y un presupuesto ajustado, daría como resultado la cinta de Kurt Wimmer, la cual cuenta con la música cañera de Klaus Badelt y las actuaciones de Christian Bale, Emily Watson y Sean Bean. No pasará a la historia pero se han estrenado cosas mucho peores. “Below” (David Twohy, 2002) es otro film que se encuentra exactamente en la misma situación que el protagonizado por Christian Bale.

Christian Bale y su katana en "Equilibrium"

La rueda y la poli cara a cara en "Rubber"

Mejores son “Eden Lake” (James Watkins, 2008) y “The children” (Tom Shankland, 2008), dos propuestas de terror bastante dignas y totalmente ninguneadas por la pésima distribución que tenemos aquí. La primera es un cinta survival repleta de fisicidad, con buena factura técnica, actuaciones decentes y un final que destaca por encima de la media. En cuanto a la segunda, es otra película de género muy estimable con niños cabrones de por medio, que recuerda y mucho a la magistral obra de Narciso Ibárrez Serrador “¿Quién puede matar a un niño?” (1976) pero sin llegar a su calidad. Otra inédita muy interesante que todavía sigue sin estreno es “Vinyan” (Fabrice Du Welz, 2008) aunque sin ir más lejos, la anterior cinta del cineasta belga tampoco se estrenó pero acabó saliendo en dvd bajo el extinto sello Stardis Pictures. En cuanto al terror más extremo del estilo de las francesas “Martyrs” o “Frontière(s)” (ya no digamos “A serbian film“), tampoco encuentra sitio en este país fuera de los festivales especializados.

Synecdoche, New York” (2008) y “Rubber” (2010) (la cual todavía podría estrenarse por aquí) son para un servidor olvidos todavía más dolorosos. Ambas son unas excepcionales películas, tan brillantes como bizarras. La primera, la cual supone el debut tras las cámaras del portentoso guionista Charlie Kaufman, es como de costumbre un extraño aunque fascinante relato que mezcla realidad con ficción, erigiéndose como una obra sobre la desazón existencial con un Phillip Seymour Hoffman inconmensurable. La segunda es un ejercicio cachondísimo de metalingüísmo cinematográfico, bruta y brillante como pocas películas, protagonizada por una rueda asesina que acaba con todo lo que encuentra por su camino y cuyo inicio es toda una declaración de intenciones.

También encontramos cintas que sí han sido estrenadas en salas pero que jamás encontraron una edición en dvd, o sólo la tuvieron en el mercado de alquiler. La mayoría de estos casos afectan a Lauren Films, que antiguamente distribuía en España todo el catálogo de Miramax y Dimension entre otras, y que debido a su quiebra (que no total desaparición) hay algunos títulos de los que conserva los derechos y por tanto Buenavista no puede reeditarlos por su cuenta como lo hace en el resto del mundo. Es cierto que una buena hornada de antiguas películas sí han sido reeditadas en dvd (caso de “El paciente inglés“, “Pulp Fiction“, la saga “Scream“, etc..) pero muchas otras todavía no se han editado para venta (“Frida“) o ni tan siquiera para alquiler (“Confesiones de una mente peligrosa“, en este caso es la propia Buenavista la que incomprensiblemente no la ha editado, aunque puede que todo se deba a que Lauren conserve parte de sus derechos en España, ya que en un principio la iba a distribuir).

Otro caso realmente curioso que aunque no se trate de cine inédito vale la pena comentar por ser un caso más de problemas de distribución, es el de “Kill Bill“. En un principio la iba a distribuir Manga Films (de hecho, en Sitges así apareció en el Vol. 1) pero luego tras un monumental retraso, la acabó estrenando Buenavista, la cual también se encargó de editarla en dvd y blu-ray. La empresa catalana presentó una demanda contra Miramax (Buenavista) por incumplimiento del acuerdo de distribución en España. La compañía norteamericana, según el presidente de Manga, argumentó que se había visto obligada a cambiar de distribuidora por decisión de la empresa matriz y le ofreció una cantidad compensatoria que Manga Films no aceptó. Menudo mamoneo todo esto.

Los protas de "Eden Lake" pasándolas canutas.

"A Bittersweet life", extraordinario film del que Jean-Pierre Melville estaría orgulloso.

Luego tenemos el mercado de cine asiático en España, el cual no ha tenido una continuidad comparable a la de otros países. Tras la ola de terror asiático ya no abundan ediciones cuidadas de films asiáticos y apenas encontramos estrenos de novedades. Durante una época Manga Films (junto a Isaan Entertainment), Notro Films, DeA Planeta y otras compañías sí editaban regularmente cosas más o menos decentes. En la actualidad sólo la ejemplar Versus Entertaiment, Intermedio o Cameo sacan cosas dignas (con extras y a veces hasta en ediciones de 2 discos) en cuanto a productos de este estilo. Films tan notables como “Survive Style 5+” (2004), “Princess Raccoon” (2005), “A bittersweet life” (2005) y “Oasis” (2002) por citar sólo algunos, permanecen todavía en el limbo patrio de cintas olvidadas. Suerte que últimamente la distribuidora Media3 (junto a Warner) está sacando directamente al mercado doméstico films asiáticos de contrastada calidad, pero amigos, estamos en cutrelandia, no todo es oro lo que reluce. Su excesivo precio tratándose de formato dvd y la ausencia total de extras en sus ediciones lastra bastante lo que podría haber sido una buena colección de cine oriental contemporáneo más del estilo de Tartan Asia que de la irregular Orient Express (DeA Planeta) de antaño.

Esperemos que poco a poco se subsanen estos defectos de distribución y se vayan estrenando (a estas alturas ya directamente en formato dvd o blu-ray) todas estas películas que por una razón u otra todavía hoy en día permanecen inéditas.

Compartir:

Xavi Darko

Hastiado de los klingons y trolls que proliferaban en mi escuela secundaria, acabé mudándome a Tatooine, un lugar libre de trekkies en donde a pesar de los cansinos Tusken, abundaba el buen tiempo, el mercadeo y las carreras de vainas. La paz y la tranquilidad reinaban hasta que un buen día quedaron quebrantadas por la irrupción de un tipo peculiar cuyo perfil se ajustaba al de los tifosi radicales del AC Milan. Se hacía llamar Darth Maul y entre hostia y hostia me rebeló que era mi padre. Como buen desertor sith, decidí migrar a un planeta verde y fértil llamado Endor del cual fui posteriormente desterrado debido al incendio masivo de cabañas de unos cada día más insoportables ewoks. Sin ganas de más mamoneo intergaláctico, decidí volver al mundo real y escribir sobre cine, tanto del que adoro como del que aborrezco. Cuando me jubile espero vivir en Hill Valley y escribir críticas positivas de las cintas de Uwe Boll.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *